El mal de ojo se produce cuando una persona mira a otra con envidia o resentimiento, causando daño a su salud, suerte o bienestar en general. El ojo turco actúa como un talismán para desviar el mal de ojo y proteger al usuario de las energías negativas. También se cree que el ojo turco tiene la capacidad de absorber la energía negativa del ambiente y limpiarlo.
Además de su función protectora, el ojo turco se utiliza a menudo como una joya y se considera un objeto decorativo popular. Muchos turistas compran el ojo turco como un accesorio y lo llevan como un amuleto para protegerse contra el mal de ojo y la mala suerte.